de 1955:
Un proyecto urbanizador presentado en el Ayuntamiento de Cartagena para construir todo un poblado a orillas del Mar Menor (Islas Menores) se justifica políticamente por la necesidad de potenciar el turismo. Para ello, la Junta Provincial de Turismo, presidida por el gobernador civil, acordó darle el visto bueno definitivo a…
“…un nuevo poblado en el Mar Menor, entre las playas de Los Nietos y Cabo de Palos, estudiándose el proyecto de urbanizacion presentado a dicho efecto por el Ayuntamiento de Cartagena.”
El 20 de julio del año siguiente, Andrés Bolarín, en un extenso artículo titulado “El turismo llegará al Mar Menor” confirmaba el inicio de las citadas construcciones.
“Para que allí tengan albergue los turistas, se están levantando cómodas construcciones a orillas de la playa, ocupando el espacio libre entre el pequeño casería de Los Nietos y la escarpada arista de Cabo de Palos”.
Y el 4 de octubre de 1957 se amplían detalles en la prensa del proyecto iniciado el año anterior:
“Comprende 159.525 metros cuadrados que serán distribuidos en la siguiente proporción: 83.305 en manzanas de construcciones habitables, con piscinas, campos de tenis y otros deportes y sala de fiestas; 8.250, para la construcción de un gran hotel; 40.000 para calles, paseos y jardines; 24.000 para la expansión de la playa, y aún quedará un sobrante de unos 5.000 metros cuadrados para emplearlos en lo que fuera necesario.
La comunicación con los poblados inmediatos se efectuará por medio de anchas pistas de asfalto que tendrán enlace con Cabo de Palos y Los Nietos. Para el próximo año ya se contará con la instalación de centros comerciales que dispongan de cuanto les sea necesario a los habitantes de estos chalets. Las obras se emprendieron con ritmo acelerado y bastarán unos pocos años para su terminación. Ya en el próximo aparecerán los primeros moradores de este nuevo poblado, que tendrá este sugestivo nombre: ‘Playa Islas Menores’”.
Islas Menores será el único gran proyecto urbanístico materializado en la costa hasta las construcciones que ocuparán toda La Manga durante el siguiente decenio.