de 1978:
De las dieciocho licencias que el Estado concedió para la instalación de casinos de juego en España, una recayó sobre el proyecto presentado por Tomás Maestre Aznar para La Manga.
Según declaró Maestre el nuevo casino crearía casi mil puestos de trabajo bajo la dirección de una empresa, Azarmenor S.A., creada expresamente para la explotación de las nuevas instalaciones en 1973.
En el casino de La Manga podrá jugarse a la ruleta y al bacarrá (prohibidos durante más de cincuenta años en España) y se ubicará frente al campo de tiro de pichón, en uno de los hoteles, el Doblemar, autorizados y subvencionados por el Estado cuya construcción empezó en 1974.
Cuando se concedió el permiso ya se había construido el sesenta por ciento de la primera fase del proyecto entre los que se incluía área de juegos, restaurante de gran lujo, piscina climatizada cubierta y mil plazas hoteleras.
“La segunda fase incluye palacio de congresos y convenciones, sala de espectáculos capaz para 1.600 espectadores, más piscinas y áreas de playas a ambos lados de la antigua franja arenosa. Para la última anualidad hay previstas otras 1.000 camas.”
En julio el nuevo Casino del Mar Menor se vio obligado a convocar una “escuela de croupiers” para formar a los futuros profesionales de las instalaciones dada la ausencia completa de personal cualificado en España. Los posibles candidatos deberán ser españoles, mayores de veintiún años, conocimientos de inglés y francés, buena presencia y carácter y tener el servicio militar cumplido…
“Asimismo deberán acompañar certificación médica acreditativa de su buen estado de salud; no padecer ninguna enfermedad infecto-contagiosa ni diabetes o epilepsia; presión sanguínea normal; perfecta distinción de colores con luz artificial; gozar de excelente oído, corazón y rapidez de movimientos y reflejos en brazos, manos y dedos.”