de 1920:
Un fuerte temporal de verano obliga a poner en marcha un dispositivo de ayuda para los torreros del faro de Las Hormigas que llevaban incomunicados con tierra desde hacía tres días…
“El torpedero salido de Cartagena logró salvar el temporal y llegar al faro situado en el bajo de las Hormigas frente al Cabo Palos, llevando alimento para los torreros que se hallaban sin comer desde hace tres días á causa del temporal”.
de 1923:
Un velero cargado de patatas embarranca en una de las calas más conocidas de Cabo de Palos…
“En la madrugada de ayer, embarrancó un laud, en Cala Antunez próxima a Cabo de Palos.
Seguidamente acudieron en su auxilio el ayudante de Marina del distrito, don Benito Cheriguini y el celador del puerto Mariano Henarejos, con personal a sus órdenes, consiguiendo que el barco quedara ayer tarde a flote y continuara el viaje sin tener que lamentar pérdidas de consideración, pues solo tuvo que aligerar alguna carga”.
de 1932:
Artículo aparecido en prensa sobre Paulina Buigues, Miss Cabo de Palos:
“Confidencialmente sabía de tu belleza y ansiaba localmente la oportunidad de admirarla. La casualidad me proporcionó la ocasión, y encantado de mi suerte y sintiendo herir tu extraordinaria sencillez, te ruego encantadora Paulina perdones, que llevado de una ambición informativa trate de describirte, tal cual eres. Fuiste elegida ‘Mis Cabo de Palos’ recientemente… Siempre un nombramiento de esa índole, supone en la agraciada, una acumulación de perfecciones tales, que hacen sobresalgan sus bellezas de entre las que aspiran a tan preciado galardón, y si Cabo de Palos es plantel de criaturas bellas, ¿Cómo serás tu, linda muchachita, que sobre todas te destacaste señaladamente? Angelical criatura; la lozanía de tus quince años resalta súbitamente al contemplarte. Eres la verdadera belleza, la natural sin afeite ni postizo que en vano tratan de avalorar el conjunto. Tu no los necesitas para ser bella y por ello lo eres, lo eres sí, en forma tal, que cuantas ‘Misses’ pasean su hermosura por toda España plasmadas en las photos de prensa gráfica, te admirarían como la rival de más valía de cuantas tuvieran que aceptar las decisiones de un fallo, para ostentar tan preciado título.
Intenté describirla… ¡loca quimera!… la luz que irradian tus ojazos azules me alucina, y quedo extático ante el recuerdo de tu célica belleza. Perdóname gentil Paulina… me es imposible continuar.”