La Manga del Mar Menor, 10 SEP 2014. Los residentes siguen sin querer renunciar al placer cotidiano de tomar una buena cerveza, y si es a las orillas del mar, mucho mejor. Si esa costumbre lo hacemos con algo propio, algo que nos muestre nuestros mejores enclaves turísticos, el momento es inigualable. Desde este verano, muchos turistas y habitantes de la zona han disfrutado de una cerveza llamada La Manga, una identidad que le han dado dos jóvenes empresarios de Cartagena que han elaborado esta cerveza artesana y que desde julio se puede degustar en varios chiringuitos de La Manga. Ellos tenían claro que ni la crisis ha podido con el idilio de ir de cañas y tapas.
“El nombre de la cerveza, tiene una doble intención. Por un lado, destacar la zona de La Manga y por otro que la gente se quiera llevar un regalo de la zona que le muestre la zona donde ha pasado sus vacaciones y le recuerde en una imagen los dos mares que ha podido disfrutar”, señala el creador Pablo Pérez. Este joven, junto a su pareja Estela Molina, comenzaron en la cocina de su casa con un kit casero llevados por su gusto por la cerveza y con el paso del tiempo y del esfuerzo han conseguido una fórmula que ya han llevado a la calle. Por el momento su producción es limitada a 2.500 botellas y su producción la elaboran en la localidad de Órgiva, Granada. Su intención es montar su producción en la zona, un proyecto en el que están trabajando.
Muy pocos la han probado este verano por los chiringuitos de la zona, pero poco a poco se está dando a conocer y promete ser una de las sensaciones del próximo verano. “Todavía estamos creciendo poco a poco. Este año empezamos tarde porque sacamos la cerveza a finales de julio y algunos chiringuitos ya tenían su cerveza. Para el próximo esperamos conseguir más puntos de venta ya que nos conocen cada vez más”, añade Pérez, quien recuerda que no son competencia de las marcas comerciales sino que “queremos que los clientes disfruten de otra manera”.
Su etiqueta también es diferente y tiene un cierto recordatorio a la década de los años setenta, donde La Manga experimentó su gran desarrollo urbanístico y social. Ha sido diseñada por el artista Carlos Calabria y en el que se puede el ver el Mar Menor por un lado en donde se distinguen las tres islas (Perdiguera, la del Barón y del Ciervo). Después le sigue un estrechamiento que simboliza la unión del Mar Menor con el Mar Mediterráneo, como si fuera el Canal de El Estacio, y al girar la botella se puede ver Isla Grosa.
Es una cerveza de fermentación alta, de color dorado, elaborada con tres maltas con un amargor herbal que puede acompañar a todo tipo de carnes y pescados y que, por supuesto, debe servirse fría. Además, por el momento sólo se distribuyen en tamaño de tercio (33cl) y tiene una graduación de alcohol que no supera los 5,5º.
Probablemente la clave esté en que irse de cañas va mucho más allá de beber cerveza; es un momento para disfrutar de la compañía de amigos o familiares, compartiendo otras muchas cosas además de la caña y las tapas; y si a eso le añades algo característico de la zona y que muestre uno de los rincones más bonitos de España, mucho mejor.