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La Manga del Mar Menor, 19 AGO 2014. ¿Imaginas tener una fiesta privada en un barco por el Mar Menor? O ¿tomarte un cóctel mientras te bañas frente a la isla privada del Barón? Pues ahora es más posible que nunca gracias al Catamarán Ole, de la empresa Astillleros Carthago Charter, que ofrece esta posibilidad todo el mes de agosto en el puerto de Tomás Maestre por sólo 12 euros. Como sabemos el buen tiempo aclara las formas de despejarse y hacer actividades al aire libre para divertirse y con los más de veinte metros de eslora con los que cuenta la embarcación hace por unas horas que se convierta en una experiencia al alcance de todos los bolsillos.
Mucha gente ya lo sabe y hay que reservar con tiempo. El Catamarán realiza cuatro salidas al día, cinco los fines de semana, y cuenta con una capacidad para 100 personas. Casi todas las salidas al completo. “La verdad que es una suerte porque la gente ya nos conoce y viene todos los años para hacer sus fiestas. Son clientes habituales porque pueden venir con los amigos o la familia a pasarlo bien”, afirma la propietaria Carmen Manero, junto a Eloy Aranda. Ella también va en el barco y explica a todos los que quieren las maravillas del barco y disfruta como si fuera su primer paseo por la laguna salada. Les gusta estar en La Manga aunque han tenido ofertas para estar en otros puertos españoles como Ibiza. Durante el invierno, el barco permanece atracado en Cartagena donde también realiza salidas.
La cubierta es un lugar para no dejar de sonreír. La brisa del mar se mezcla con las personas que aprovechan cada rincón para sacarse una foto que seguro será uno de sus mejores recuerdos veraniegos. Sus diez mesas redondas con capacidad para diez personas cada una muestran en una fotografía todos los puertos del Mar Menor. En sus sillas, muchas bolsas y poca gente sentada. Todos de pie al ritmo de la música o asomados para contemplar los bonitos paisajes que se muestran en la laguna.
En el precio no se incluye la bebida que se sirve en el barco a unos precios razonables, lo que hace que muchos grupos monten sus pequeños picnics a base de bocadillos y comida fría. El ambiente de estas fiestas es muy simpático. Alberga desde niños que se suben por primera vez a un barco de estas características hasta personas mayores que disfrutan con sus familiares de un paseo por el mar. Muchos de ellos nunca habían estado tan cerca de la Isla Mayor o del Barón, propiedad de Natalia Figueroa, mujer del cantante Raphael, donde el catamarán pasó cerca de una hora para aprovechar sus cálidas y transparente aguas. Pocas veces te puedes bañar bajo la mirada del palacete del estilo neomudéjar y recordar sus leyendas románticas y trágicas y mirar el bosque único de palmitos.
“Llevo más de veinte años veraneando en La Manga y no sabía que existía este tipo de servicios. Me lo comentó un amigo y hemos venido un grupo a probarlo. Es una maravilla. Nunca había visto la isla tan de cerca y es muy bonita”, dice Raúl Fernández, de Barakaldo, minutos antes de zambullirse en las aguas.
El trayecto sigue rodeando la isla y enfilando hacia el Puerto Tomás Maestre de nuevo. En esa parte es cuando la música disco hace de las suyas. Hay para todas las edades y da igual si es un niño o su padre, todos bailan juntos mientras la brisa refresca el ambiente. Muchos aprovechan y se acuestan sobre las lonas de la cubierta para que parezca la sensación de surcar las olas. Son tres horas de trayecto y la gente está encantada. Han podido salir de la rutina veraniega y han podido disfrutar de las maravillas que ofrece el Mar Menor.
