“Si el gobierno fuera participativo, no harían falta segregaciones”

– Entrevista a la candidata de «Cartagena Sí Se Puede» a la alcaldía de Cartagena, Pilar Marcos.

Pilar Marcos se define como una “currante”. Es una persona activa, alegre, que mira a la cara y que después de 28 años como Educadora Social en el Ayuntamiento de Cartagena ha dado el salto adelante para poder ayudar a sus vecinos, a los que “quiere recuperar el poder que les corresponde”. Agradece a su formación política «Cartagena Sí Se Puede», creada por seguidores y miembros de Podemos, el liderar este proyecto para optar a ser alcaldesa de Cartagena a partir del 24 de mayo. Y lo tiene bastante claro: “somos profesionales en nuestras materias y venimos a trabajar”.

– Su partido político guarda una relación especial con varios vecinos de La Manga.

– Tenemos muchos compañeros del Círculo de La Manga, que fueron los primeros que empezaron con las reuniones antes de las elecciones Europeas y se consideran los orígenes del partido. Estamos en contacto permanente, han colaborado muchísimo con el programa electoral que estamos a punto de presentar.

– Entonces sabrán de primera mano sus necesidades,

– Hay bastante indignación y sensación de abandono y que la administración se ha olvidado de ellos. Ellos creen que sólo se acuerdan en la época de verano. En el sentido cultural y social hay un abandono absoluto y eso es lo que nos han transmitido. No aguantan más y al parecer Podemos vieron una herramienta adecuada para poder transmitir como se encuentra esa zona.

– ¿Qué tipo de demandas tienen?

– Hay muchas fórmulas. Evidentemente a través de vecinos y vecinas que se recojan todas las demandas de la zona. Como los jardines, que hay un abandono absoluto, o la educación y el instituto. Los propios servicios del Ayuntamiento que son deficientes y el tema del transporte es prioritario, una de las cosas que más hemos pedido. La FEVE es una prioridad absoluta para que llegue a Cabo de Palos. El servicio de autobuses también es muy malo, ya que muchos usuarios se van a la parada y no saben cuándo va a llegar, si lo hace. Eso es algo que no debe suceder. También nos han comentado la escasa operatividad de La Manga Consorcio, que creo que sirve para limpiezas de playas o adecuación de jardines, pero no tiene una gran transcendencia en la zona y ni los propios vecinos saben para que sirve.

– ¿Qué planes tiene para los empresarios de la zona?

– Nosotros vamos a apoyar a los pequeños empresarios y no se pueden tener a esas personas subsistiendo y malviviendo durante todo el año hasta la época estival. Hay que ayudarles. Hay que estudiar para poder facilitarles su día a día como el pago de los tramos, la gestión de documentos, y me gustaría llegar a poder ayudarles.

– ¿Se podría aumentar el turismo?

– Los turistas que llegan a Cartagena también tenemos que hacer que vayan a otros lugares y uno de ellos es La Manga. Tenemos unas playas preciosas y podemos aprovechar que la temperatura es buena para que los cruceros que llegan a la ciudad recorran la zona. Se puede ir en autobuses y eso sirve para promocionar el turismo en la época de invierno.

– Si ganara las elecciones ¿qué les diría vecinos y empresarios del Rincón de San Ginés?

– Lo tengo claro: reunirme con ellos. Nuestro objetivo principal es crear una gran estructura de escuchas ciudadanas. Vamos a ir a todos los pueblos y vamos a hablar con la gente y vamos a ver lo que se necesita en la zona y les diremos cuál es el presupuesto que tenemos para ello. Hay una deuda bestial en el Ayuntamiento de Cartagena y tenemos que estudiar eso en profundidad para luego poder ofrecer a los vecinos sus prioridades que serán ellos las que los decidan.

– ¿Qué le parece que algunos presidentes de asociaciones vecinales figuren en las listas electorales?

– Eso es así siempre. Tenemos un problema importante con las juntas vecinales, no se puede permitir que las asociaciones de vecinos estén manejadas por el partido que gobierna. Los presidentes son caciques de una zona y son los ciudadanos los que deben elegir y decidir de forma democrática cómo se gestiona la asociación de vecinos y las reclamaciones que deban hacer. Este problema lleva muchos años y nosotros no lo vamos a permitir.

– Muchos vecinos apuestan por una Entidad Local Menor para la gestión de la zona ¿opina lo mismo?

– Si el gobierno fuera participativo, no harían falta las segregaciones. La gente lo pide porque se ven olvidados y ninguneados por el Gobierno. En el momento que el Ayuntamiento funcionara bien, los vecinos no lo pedirían porque está haciendo su función. Lo que tenemos que hacer es devolver el poder que les damos los ciudadanos, que no se sientan olvidados. La segregación es el resultado de un abandono.

– Ustedes han mostrado preocupación por los vertidos al Mar Menor

– Tenemos que sentarnos, la Comunidad Autónoma, los empresarios que trabajan la agricultura en la zona y los afectados. Lo que sucede es que existen empresas que realizan cultivos de gran extensión para después exportar al extranjero, y a los que les importa poco o nada que se degrade el Mar Menor con sus acciones: tirando tóxicos, vertidos, destrozando así nuestra riqueza natural. Hay que sentarse y hablar con todos los implicados para empezar a plantearse a corto, medio, largo plazo una regeneración del Mar Menor. No tenemos más turismo porque está degradado como Los Urrutias o Los Nietos, donde no te puedes bañar. Es ilógico.

– ¿Qué tienen planteado para Calblanque?

– Es una degradación lo que se está cometiendo en Calblanque. El uso de autobuses debe ser racional y esos ingresos se deben reinvertir en el mantenimiento de ese espacio. La Comunidad debe poner límites a los espacios naturales, por eso los autobuses deben ser gratuitos porque las playas son de los españoles.

– ¿Qué opina de la situación en la que se encuentra el Monasterio de San Ginés?

– Que se debería de restaurar y darle el valor e importancia que tiene. Es un bien cultural y es de los más antiguos que tenemos en Cartagena. La Comunidad Autónoma es la que debe aportar más medios y más dinero. Es de titularidad municipal, pero al ser un Bien de Interés Cultural la Comunidad tiene que aportar más. Se debe arreglar para que los ciudadanos lo disfruten ya. Lo veo como un edificio con grandes recursos culturales, por tanto en mi opinión nunca se le debería conceder a una empresa privada. Todo lo debe gestionar una empresa pública.